Fregadero no traga pero no está atascado: causas reales y soluciones

Pocas cosas molestan tanto en casa como cuando el fregadero no traga. Miras el hueco del desagüe, no ves restos de comida ni nada raro y piensas: “mi fregadero traga lento, pero no está tapado… ¿qué pasa aquí?”.

Si tu fregadero no traga pero no está atascado a simple vista, o el agua desaparece muy despacio, es casi seguro que haya un problema oculto en la tubería, en el sifón o incluso en la ventilación de la red de saneamiento.

En esta guía te explicamos:

• Por qué no se va el agua del fregadero si no está tapado.
• Las causas más frecuentes cuando un fregadero no traga agua o el desagüe del fregadero no traga nada.
• Cómo desatascar un fregadero que no traga nada paso a paso.
• Qué hacer si te ocurre lo mismo en el baño y el lavabo no traga pero no está atascado.
• Cuándo conviene llamar a un profesional para evitar daños mayores.

1. Síntomas típicos: ¿qué notas exactamente en el fregadero?

Antes de tocar nada, conviene definir el problema. Las situaciones más habituales son:

• Mi fregadero traga lento: el agua baja, pero tarda mucho y se forma un “embalse” en la cubeta.
• El fregadero no traga agua en ciertos momentos y de repente hace un ruido fuerte y se vacía de golpe.
• El desagüe del fregadero no traga agua cuando se usa el lavavajillas o la lavadora al mismo tiempo.
• Hay gorgoteos y malos olores incluso aunque no estés utilizando el fregadero.
• Otros aparatos (lavabo, plato de ducha) empiezan a tragar peor a la vez.

Todos estos indicios indican que el problema suele estar más allá de la rejilla, en el sifón o en la tubería de PVC que sale del mueble.

2. Por qué no se va el agua del fregadero si no está tapado

Hay varias razones por las que no se va el agua del fregadero aunque desde arriba parezca todo limpio:

2.1. Acumulación de grasa y jabón en las paredes del tubo

Cada vez que friegas platos, algo de grasa, restos de aceite y detergente se pega a las paredes del tubo. Con el tiempo forman una “costra” que reduce el diámetro útil.

Aunque no haya un tapón visible, la tubería queda más estrecha y:

• El agua circula más lenta.
• Los restos sólidos se quedan atrapados con más facilidad.
• Cualquier pequeño objeto (un trozo de comida, una cáscara, etc.) termina bloqueando el paso.

2.2. Sifón sucio o mal montado

El sifón es la pieza curva que se ve bajo el fregadero. Retiene agua para evitar que suban los olores de la red de saneamiento.

Cuando el fregadero no traga pero no está atascado en la rejilla, muchas veces el problema está en ese sifón:

• Curvas llenas de restos y grasa.
• Juntas que dejan pasar aire y rompen el sello hidráulico.
• Montaje incorrecto, con partes mal roscadas o desniveladas.

2.3. Tubería con poca pendiente o “panza”

Si el tramo horizontal que sale del fregadero no tiene caída suficiente hacia la bajante, el agua se queda parada en medio y deposita la suciedad en la parte baja, formando una especie de “panza”.

Desde arriba parece que todo está despejado, pero el agua se frena y da la sensación de que no traga el fregadero.

2.4. Obstrucción más lejos, en la bajante o en el colector

En edificios y viviendas antiguas es muy común que el atasco esté varios metros más allá del mueble de cocina:

• Bajantes comunitarias llenas de grasa.
• Codos empotrados en paredes, con años de suciedad.
• Tuberías antiguas de hierro o fibrocemento degradadas.

En esos casos puedes desmontar el sifón mil veces y seguirás igual: el fregadero no traga agua porque el problema está en otra parte de la red.

2.5. Problemas de ventilación de la red

Cuando no hay ventilación suficiente, se generan depresiones y sobrepresiones dentro de las tuberías. El resultado son:

• Gorgoteos en el fregadero.
• Olores que suben desde el desagüe.
• Momentos en los que el fregadero no traga y, de repente, el agua se va de golpe.

3. Cómo desatascar un fregadero que no traga nada (paso a paso)

Si eres un poco manitas, hay varias cosas que puedes probar antes de llamar a un profesional. Vamos a ver cómo desatascar un fregadero que no traga nada de forma segura.

⚠️ Importante: si sospechas que el atasco está en la bajante del edificio o ya has tenido inundaciones, lo más prudente es no insistir y llamar a un servicio de desatascos.

Paso 1: prueba con el desatascador de goma

1. Tapa el rebosadero del fregadero con un trapo húmedo.
2. Llena la cubeta con unos centímetros de agua caliente.
3. Coloca el desatascador de goma sobre el desagüe y bombea varias veces con fuerza.
4. Retira el desatascador y observa si el agua se va con más facilidad.

Si después de varios intentos el fregadero no traga agua, pasa al siguiente paso.

Paso 2: desmonta y limpia el sifón

1. Coloca un cubo bajo el sifón.
2. Afloja las tuercas manualmente (o con una llave, si están muy apretadas).
3. Saca el cuerpo del sifón y limpia toda la suciedad acumulada: pelos, grasa, restos de comida…
4. Aprovecha para revisar las juntas de goma y sustituirlas si están deformadas.
5. Vuelve a montar todo, procurando que el sifón quede en posición vertical y sin torsiones.

Muchas veces, con esto, el problema se soluciona y deja de pasar que el desagüe del fregadero no traga agua.

Paso 3: usa una guía o muelle desatascador

Si el sifón está limpio pero mi fregadero traga lento o no termina de vaciarse:

1. Introduce una guía manual por la tubería que entra en la pared.
2. Empuja con suavidad mientras giras la guía para romper los tapones que haya más adelante.
3. Una vez que notes que avanza bien, retira la guía y deja correr agua caliente unos minutos.

Nunca fuerces la guía si se queda bloqueada; podrías dañar una tubería antigua.

Paso 4: limpieza química (solo en último recurso)

Los productos químicos comerciales pueden ayudar, pero también dañan tuberías, juntas y, sobre todo, pueden ser peligrosos si después se va a trabajar con máquinas de agua a presión.

Si decides usarlos:

• Sigue al pie de la letra las instrucciones del fabricante.
• No mezcles productos distintos (por ejemplo, sosa y lejía).
• Ventila bien la cocina.

Si tras eso el fregadero no traga pero no está atascado en el sifón, es momento de llamar a un profesional.

4. Mi fregadero traga lento: mantenimiento para que no vuelva a ocurrir

Una vez resuelto el atasco, es buena idea cambiar algunos hábitos para que el problema no reaparezca al poco tiempo:

• No tires aceite ni restos de fritura por el fregadero. Guárdalos en un recipiente y llévalos a un punto limpio.
• Limpia los platos de restos sólidos antes de meterlos en el fregadero.
• Una vez a la semana, vierte agua muy caliente (no hirviendo si la tubería es antigua) para disolver grasa ligera.
• Revisa el sifón cada cierto tiempo y límpialo, aunque el fregadero trague bien.
• Si usas lavavajillas, revisa también su desagüe, porque en muchas viviendas comparte tramo con el fregadero.

Con estos cuidados reducirás mucho las posibilidades de volver a tener un fregadero que no traga agua.

5. ¿Y si el lavabo no traga pero no está atascado?

Lo mismo que ocurre en la cocina puede pasar en el baño: el lavabo no traga pero no está atascado a simple vista.

Las causas suelen ser parecidas:

• Restos de pasta de dientes, pelos de la barba y jabón en el sifón.
• Tubo de PVC demasiado estrecho o con poca pendiente.
• Conexión mal hecha al tubo del fregadero o a la bajante.

En la mayoría de los casos, desmontar y limpiar el sifón del lavabo es suficiente. Si también la ducha, el bidé o el inodoro empiezan a dar problemas, puede tratarse de un atasco general en la red de saneamiento de la vivienda.

6. Cuándo llamar a un profesional

Aunque hay mucho que puedes hacer por tu cuenta, hay situaciones en las que la mejor decisión es delegar:

• El fregadero no traga agua y se te inunda la cocina.
• Notas que otros desagües de la casa también empiezan a ir lentos.
• El problema se repite cada pocas semanas.
• Vives en una comunidad de vecinos y sospechas que el atasco está en la bajante.
• Has intentado varios métodos y no traga el fregadero igual.

En esos casos, un equipo profesional puede:

• Localizar el punto exacto del atasco con cámara.
• Limpiar la tubería con máquinas de agua a presión o con espirales mecánicas.
• Revisar toda la instalación para evitar que el problema vuelva a corto plazo.

Preguntas frecuentes

¿Es normal que un fregadero haga burbujas al tragar?

No, suele ser señal de problemas de aireación o sifón.

¿Puede solucionarse sin herramientas?

Sí, si es un problema leve de aireación o sifón. Si persiste, mejor contactar a un profesional.

¿Puede empeorar con el tiempo?

Sí, si no se corrige, puede derivar en atascos o daños en la instalación.

En conclusión, limpiar el sifón es una solución efectiva para resolver un lavadero que no evacúa, pero no está atascado. Con estos consejos y soluciones podrás resolver este problema de manera eficiente; y si no lo consigues, recuerda que nuestros especialistas en desatascos en Madrid pueden ayudarte.