Arqueta metálica

Una arqueta metálica es un depósito que se utiliza para recibir, enlazar y distribuir los conductos subterráneos por los que circulan las aguas residuales. También se pueden usar para los cables de la electricidad o para los conductos por los que circula el gas que lleva hasta tu casa. Puedes encontrar arquetas metálicas en la calle. Suelen estar enterradas y tienen una tapa donde se identifica lo que hay en el interior. Existen diferentes medidas de arquetas metálicas, pero todos ellas te ofrecen las mismas ventajas. 

Características de una arqueta metálica

La arqueta metálica tiene diferentes características, que hacen que sean muy utilizadas en las redes de saneamiento, en las instalaciones eléctricas, de telecomunicaciones y en las instalaciones del gas. 

Registro

Las arquetas metálicas tienen que ser registrables para tener un fácil acceso. Las arquetas metálicas de registro tienen que permitir diferentes funciones como la inspección, el mantenimiento y la limpieza de la red de saneamiento de tu edificio.

Protección

Una de las principales características de las arquetas metálicas es su función de protección. Las arquetas metálicas están fabricadas con un material muy duradero, ya sea hierro, acero o aluminio, que les permite ser muy resistentes a la corrosión y a las diferentes condiciones climáticas.

Localización

Las arquetas metálicas suelen localizarse en la calle, ya que se utilizan en las redes públicas de saneamiento y se encargan de distribuir las aguas residuales que provienen de las viviendas hasta la red de alcantarillado público.

Cuáles pueden ser los tamaños y medidas de una arqueta metálica

Las arquetas metálicas pueden ser de diferentes tamaños que dependen del uso que se les vaya a dar. Las arquetas metálicas, independientemente de su tamaño, siempre son cuadradas.

40×40

Las arquetas metálicas de 40 x 40 son las más utilizadas para instalaciones de media tensión, como por ejemplo interruptores o enchufes de luz.

50×50

Las arquetas metálicas de 50 x 50 pueden tener diferentes usos según su diseño y en función de la protección que cuenten y los componentes que vayan a contener. 

100×100

Las arquetas metálicas de 100 x 100 son las que más se están utilizando en las zonas donde se están construyendo nuevos edificios y urbanizaciones.

125×125

Las arquetas metálicas de 125 x 125 se utilizan en fábricas, talleres y aparcamientos. Son recomendables que se usen en los lugares donde hay tráfico de vehículos.

Ventajas de las arquetas metálicas en el saneamiento del agua

La arqueta metálica ofrece ventajas en la red de saneamiento del agua porque evita la fuga de malos olores, la propagación de plagas,  evita las inundaciones y permite un fácil acceso para su limpieza.

Evita la fuga de malos olores

La arqueta metálica de saneamiento es estanca, por el hecho de que la tapa que la cierra es hermética. Esto permite que eviten la fuga de malos olores de las aguas residuales que circulan por el interior de sus conductos.

Facilidad de la limpieza

Una de las principales características de las arquetas es que son registrables. Por lo tanto, realizar tareas de limpieza en su interior es muy sencillo, ya que su acceso es muy fácil. El hecho de que las arquetas metálicas sean fáciles de limpiar, permite que se eviten atascos en la red de saneamiento del agua cuando se tiran elementos, como toallitas o tampones, que no pueden circular por el interior de las tuberías.

Previene la propagación de plagas

En las aguas residuales se pueden encontrar gran cantidad de gérmenes y bacterias, que si entran en contacto con el ser humano, pueden producir plagas. Por lo tanto, una de las principales ventajas de las arquetas metálicas de agua es la prevención de la propagación de posibles plagas, ya sean de bacterias o de animales que viven en el interior de la red de saneamiento del agua.

Evita inundaciones

Al ser estancas, evitan que se produzcan inundaciones si hay una obstrucción en las tuberías que se encargan del saneamiento del agua o si se producen fuertes lluvias.